Parte I: La súper señora del colon se hace una colonoscopia
¡Así que ahora es mi turno! Viajando por todo el país con el Prevenir el Cáncer Súper Colon® es mi trabajo. Trabajar para generar conciencia educativa sobre el cáncer colorrectal y los exámenes preventivos en diferentes lugares me ha permitido conocer a muchas personas maravillosas que han compartido sus experiencias sobre cómo hacerse una colonoscopia. Generalmente, no escuchas buenas historias cuando estás parado frente a un colon inflable de 20 pies de largo y 8 pies de alto. Entonces, por mucho que mi cabeza supiera que una colonoscopia era algo bueno, una parte de mí corría en dirección contraria perseguida por imágenes horribles en mi mente. Entonces el New York Times publicó un artículo sobre el miedo como la razón #1 por qué la gente en los Estados Unidos no se hacía una colonoscopia de detección a los 50 años.
Vale, vale, no tengo miedo; ¡hagámoslo! Una llamada a un gastroenterólogo local (GI doc), recomendado por un vecino, me consiguió una cita para conocer el procedimiento de colonoscopia y tomar decisiones, con el médico, sobre lo que funcionaría mejor para mí. El médico gastrointestinal me mostró fotografías del interior del cuerpo humano y me explicó exactamente qué ocurriría antes, durante y después de la colonoscopia. Ella me dijo que había varias preparaciones diferentes disponibles y me dio instrucciones detalladas sobre qué hacer, qué no hacer y qué esperar.
Luego tuve la oportunidad de hablar con la enfermera gastrointestinal, quien me brindó excelentes consejos para completar la preparación.
- Para reducir cualquier malestar anal, use toallitas húmedas para adultos o un rociador de agua para limpiar en lugar de papel higiénico. La vaselina “ahí abajo” te ayuda a no irritarte.
- Una vez que tomes la preparación, sigue moviéndote; “Está bien, no vas a dar un paseo por el bosque”, pero pasar la aspiradora, caminar por la casa, subir escaleras, ¡todo ayudará a que tus intestinos se vacíen antes y puedas realizar esta preparación!
- Tenga a mano muchos líquidos claros para beber. El agua se vuelve ABURRIDA y necesitas mantenerte hidratado. El caldo sin grasa es bueno, pero lo que me salvó fue la gelatina. Realmente me llenó. Los demás líquidos, de cualquier color excepto rojo o azul; jugo de fruta colado (el jugo de manzana realmente reduce el sabor de la preparación), Crystal Light, agua, café simple, té simple, refrescos dietéticos (el ginger ale es excelente para reducir el sabor de la preparación), paletas heladas de cualquier color excepto rojo o azul .
- Esté preparado para pasar la mayor parte del día antes de la prueba en el baño. Los libros y revistas son una ventaja definitiva.
- Sigue al pie de la letra las indicaciones del médico. No querrás tener que hacer toda la preparación.
- LLAME al consultorio del médico para obtener ayuda si tiene algún problema o no comprende las instrucciones de preparación.
Ahora tengo los hechos y tomé una decisión sobre qué tipo de preparación y anestesia quería. ¡Estoy en el horario y listo para comenzar! (Ohhhh, malo.)
¡Consulta mi próximo blog sobre la preparación y el procedimiento en sí!